Estrategias para salir de la violencia
Las estrategias de las mujeres para salir adelante pasan por lo institucional y la colaboración con la justicia, pero no solo. Son muchas las instituciones, organizaciones y colectivos que proporcionan recursos que contribuyen a la toma de conciencia, la toma de decisiones, y a poder continuar la vida con garantías. Y son protagonistas muy importantes de las historias que constituyen este informe. Desde instituciones de la administración pública hasta organizaciones religiosas y humanitarias, pasando por el trabajo de acompañamiento y soporte emocional de las asociaciones de mujeres y colectivos feministas de diversa índole: cada recurso ofrece lo que puede, y tiene también sus limitaciones.Es necesario que los y las profesionales estén especializados. Es necesario que tengan la capacidad de analizar la interseccionalidad de cada vida. Es necesario que las soluciones ofrecidas sean sostenibles y no meramente asistenciales. Y es necesario que las entidades responsabilizadas de ofrecer una ayuda cuenten con los recursos económicos para hacerlo, para que las intenciones no se queden en papel mojado.Dentro de esta red, destacan las asociaciones de mujeres —entre ellas, migradas— que con escasos recursos económicos realizan un acompañamiento personalizado de las víctimas y generan espacios de apoyo mutuo, fundamentales para que ninguna mujer sienta que está sola. Pero la benevolencia nunca puede sustituir a lo que las instituciones tienen que garantizar: los derechos. Frente a la idea, que se extiende por la sociedad española, de que los recursos contra la violencia de género son abundantes e incluso excesivos, estos testimonios dan cuenta de lo contrario: de sus limitaciones y de su dispersión.
Tirar del hilo: historias de mujeres migradas
supervivientes de violencia de género